Ostias de granito

Revienten pues, sus inmensas cúspides de gelatina.

Millones de particulas pululantes y palpitantes ondean graciosamente por el cuello de mi camisa.

Muere el niño de ignota enfermedad, causa de la mas displicente indiferencia del mismo ser que le vio nacer 10 años ha.

Inmensas llanuras estriadas se ciernen descubriendo permanentemente el paso al infinito. Nunca serás el mismo, pues el infinito hiede a tu propia idiosincrasia.

Maldito avioncillo de papel, nunca me salen como quiero. Haga frio o calor, viento o total quietud, siempre alza su patetico vuelecillo tan irrisorio que haria llorar a Nerón.

Ostias de granito, ignominia de blanca seda en el rostro del noble. Afrenta al orgullo, desafio al honor. Óbito del hombre por una sagaz mano armada.

Creen que su estancia en la estancia (valga la redundancia) vivificará el aliento de los caídos, pero la perorata palabrería que difunden entre la "muribundez" solo incita al suicidio.